viernes, 4 de agosto de 2017

LA DISPUTA ENTRE LOS GRUPOS DE MORENO Y CORREA-GLAS ES ECONÓMICA
Bloque Proletario ante los sucesos políticos que está viviendo el país:
1. Las disputas al interior del gobierno y del partido de Alianza País tienen que ver con asuntos económicos y no político-ideológicos como se pretende mostrar a la opinión pública. Alianza País desde sus inicios se conformó como una plataforma amplia donde convergieron grupos monopólicos tradicionales, sectores burgueses medios, partidos politiqueros tradicionales de izquierda y una pequeña burguesía arribista que lograron nuclear a su alrededor varias organizaciones de tinte popular, que en base a ofrecimientos e intereses particulares apoyaron dicho proyecto. El interés inicial y actual no se ha modificado: utilizar la estructura estatal para beneficiarse de los negociados y la corrupción.
2. Con el gobierno de Alianza País, hace diez años, asciende una facción burocrática de la burguesía, que utiliza el Estado como palanca de acumulación y enriquecimiento, sin afectar los intereses generales de las élites tradicionales.
Este hecho fue denunciado desde el inicio mismo de este gobierno por grupos como el Movimiento Vientos del Pueblo y la Coordinadora Campesina Popular, mientras toda la izquierda tradicional (MPD-Pachakutic) que se proclamaba opositora dio su apoyo durante años a la farsa denominada revolución ciudadana, a la vez que lucraban mediante puestos en ministerios y la asamblea.
3. Alianza País modernizó el aparato estatal, sacándolo de la crisis institucional en la que había caído fruto del neoliberalismo. Dicha modernización nunca tuvo que ver con los intereses de las masas populares y los sectores empobrecidos del país, sino con un despojo sistemático de derechos; con una agresiva criminalización y corporativismo orientado a la desmovilización y contención de la protesta social; y especialmente con el desarrollo de una estructura mafiosa destinada a favorecer a las corporaciones imperialistas y a las élites locales. Todo perfeccionamiento del Estado burgués incide negativamente en las condiciones de vida, organización y lucha de las masas populares, pues éste no es más que el poder político de la clase dominante puesto en marcha para sus propios intereses.
4. Alianza País generó todo un aparato que garantizaba sistemática y racionalmente los negociados de los que se han beneficiado directamente los altos funcionarios del Estado, donde se combinaron procedimientos “legales” (altos salarios, contratación de empresas o consultorías) e ilegales (sobornos, coimas, porcentajes de entre el 20% y 30% de los contratos firmados). Hoy empiezan a saltar a la vista decenas de casos de corrupción en los sectores estratégicos y en otros sectores de la economía.
5. Dichos casos de corrupción no han podido pasar inadvertidos por dos razones: el abuso o exceso de negociados que es inherente a la facción burocrática, pues es su razón de ser; y el ascenso del grupo de Lenin Moreno.
6. Los Correa, Glas, Alvarado, Mera y demás altos funcionarios del correísmo son unos ladrones miserables que deben ser encarcelados.
7. Cuando los dirigentes de Alianza País eligieron a Moreno como candidato presidencial, sabían que no era el más apto para asegurar los intereses de los grupos afines a Correa, pero era la única carta con posibilidades reales de ganar. Sin embargo no creían que se iba a salir tanto del guión original. Algunos especulaban que una vez en el poder Moreno renunciaría por enfermedad, quedando como presidente Glas. Arriesgaron y perdieron, subestimaron al grupo de Moreno o simplemente les tocó ponerlo, ahora los resultados se hacen evidentes. Correa y su séquito creían que en la contradicción desarrollada en Alianza País ellos tenían el aspecto dirigente y que podrían seguir manejando su partido y el Estado por encima del grupo de Moreno. La realidad es otra, quien lleva ahora el aspecto dirigente en dicha contradicción es Moreno y su grupo, pues el control del ejecutivo en un estado presidencialista, característica política de los países semi-coloniales, le asegura la hegemonía sobre el resto del aparato y su partido.
8. Una vez en el poder, Lenin Moreno ha hecho acercamientos a partidos, grupos y medios de comunicación considerados enemigos del correísmo. Ello no es más que una vieja estrategia de gobernabilidad que ahora es usada además para vencer un enemigo al interior de su propio movimiento. Es decir, no hay un interés real de mermar el aparato represivo y conculcador de derechos, sino ganar tiempo, fuerza y aliados para derrotar a su enemigo principal en este momento.
9. Una vez derrotados los grupos afines a Correa, seguirá en marcha el proceso de enriquecimiento mediante la corrupción estatal y el ataque permanente a los sectores populares pero con un rostro renovado, lo cual no es más que la estrategia implementada históricamente por las élites locales.
10. Moreno fue funcionario del anterior gobierno, fue cómplice en todas las medidas y políticas implementadas por éste, fungió como rostro humano de un aparato destinado a la imposición y al privilegio. Ello no hay que olvidarlo, pues el guardián de turno de las élites empresariales y burocráticas es parte de lo mismo que ahora él critica.
11. Es insólito, risible e indignante que los Bucaram hablen de honestidad mientras su familia se robó millones en la administración pública tanto en la alcaldía de Guayaquil como cuando el PRE llegó al gobierno; que Guillermo Lasso de clases de moral cuando se enriqueció gracias al feriado bancario después del que su banco lograría colocarse como uno de los principales del país, poniéndose como ejemplo cuando vive del chulco legalizado, de la especulación, del parasitismo financiero; que las mafias de las centrales sindicales y los dirigentes de los partidos reformistas de izquierda digan que tienen las manos limpias, mientras también han sido beneficiarios de la corrupción estatal, del apoyo a Lucio Gutiérrez, Correa, etc. y viven de las migajas que les entregan las élites empresariales.
12. Las organizaciones revolucionarias y los sectores populares no debemos bajar la guardia ante este nuevo gobierno, ni ante la falsa oposición. Debemos combatirlos firmemente sin otorgarles ni un ápice de confianza y crédito.
13. Es importante denunciar y esclarecer todos los hechos de corrupción, pero no manejándolos como hechos aislados, sino como una práctica que es inherente y forma parte de la esencia del Estado burgués.
14. Ya llegará el momento en el que todos estos parásitos que roban y explotan al pueblo rindan cuentas de sus actos. Todas las humillaciones, burlas y engaños serán aplastados por los proletarios conscientes y decididos que echarán abajo mediante una revolución esta vieja y caduca estructura.
15. El Bloque Proletario hace un llamado al pueblo, a la juventud y a los trabajadores, a organizarnos contra este gobierno y a afianzar el camino de una verdadera revolución en nuestro país.
¡Ni Moreno, ni Correa, abajo la burguesía burocrática!
¡Sepultemos a la vieja izquierda colaboracionista que también se beneficia del negocio estatal!
¡Por el desarrollo de una nueva corriente revolucionaria en el Ecuador!
BLOQUE PROLETARIO DE ECUADOR